"Algo mágico sucede": El director de Cómo entrenar a tu dragón revela la mayor ventaja de la acción real sobre la animación.
La versión live-action de Cómo entrenar a tu dragón llega a los cines, un remake de una de las películas animadas más queridas de DreamWorks. Esta nueva versión es fiel a la película original , pero el director Dean DeBlois también logró aportar nuevos giros a la producción.
En una entrevista con Animation Magazine, Dean DeBlois (quien dirigió la animación junto a Chris Sanders ) explicó las diferencias y ventajas de la acción real.
“¿Dónde podemos hacerlo más inmersivo, profundizar en la mitología o enriquecer los personajes y prestar más atención a esas relaciones?”, preguntó DeBlois.
Cuando tienes actores en un set y les permites representar una escena, crear una cadencia y darles tiempo al ritmo del diálogo, ocurre algo mágico. No estás creando la interpretación como en la animación, seleccionando los mejores fragmentos de múltiples tomas, uniéndolos y dejando que los animadores aporten sus interpretaciones. Se trata simplemente de lo que los actores aportan, incluyendo todo lo que hacen físicamente. Te aseguras de que todas las piezas estén en su lugar para que los actores se sientan libres de encarnar a los personajes, de ser parte de la escena y moldearla. Así que surge una verdad.
El vuelo de un dragón es una de las mayores diferencias entre la acción real y la animación. «Podríamos explorar la calidad visceral y realista de lo que sería volar un dragón real», explica el director. «No nos inclinaríamos por la fantasía, sino por la calidad fotorrealista, si pudiéramos tener dragones vivos…»
terra
